Megaoperativo contra la explotación infantil desarticula redes en Quilmes y Berazategui

En un amplio despliegue enmarcado en el operativo nacional “Protección de Infancias V”, la provincia de Buenos Aires fue escenario de una masiva intervención contra redes de abuso y explotación sexual infantil. La acción coordinada por el Departamento de Delitos Conexos a la Trata, Ciberpedofilia y Grooming de la Procuración General bonaerense, incluyó 165 allanamientos simultáneos en 84 localidades.

Uno de los epicentros de esta vasta operación se centró en la jurisdicción de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 8 de Berazategui, dirigida por el fiscal Dr. Daniel Ichazo. Desde esta dependencia, se coordinaron 18 allanamientos simultáneos que se extendieron por varias localidades, incluyendo Quilmes, Berazategui, Florencio Varela, San Miguel y Tigre, impactando directamente en la desarticulación de estas redes criminales en la región sur del conurbano.

Como resultado de estos procedimientos, se logró la detención de un abusador sexual infantil, quien fue imputado por los delitos de abuso sexual con carnal y corrupción de menores. Adicionalmente, tres personas fueron aprehendidas por su participación en la distribución de material de violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes, y otras 14 personas resultaron imputadas por tenencia de dicho material.

Durante los allanamientos, cuatro menores fueron identificados y, afortunadamente, rescatados de estas situaciones de vulnerabilidad. Asimismo, se incautaron diez teléfonos celulares, cuatro discos rígidos, diversas memorias y pendrives, elementos que serán sometidos a peritajes exhaustivos con el objetivo de identificar a más víctimas y posibles cómplices dentro de estas redes.

Un dato alarmante y revelador que surgió de los operativos es la recurrencia de un mismo patrón en varias de las locaciones allanadas, denominadas por los investigadores como “cuevas”. Se trata de habitaciones sin luz natural, con escasa ventilación y la presencia de botellas utilizadas como recipientes de orina. Estas condiciones extremas revelan la clandestinidad en la que operaban los abusadores y la urgencia de la intervención policial y judicial para desmantelar estas estructuras.

El operativo “Protección de Infancias V” reafirma el compromiso de las autoridades judiciales y policiales en la lucha incesante contra los delitos sexuales que afectan a menores, tanto en el entorno digital como en la realidad física. Las investigaciones sobre estos hechos continúan activas con el fin de profundizar en la red de complicidades y asegurar justicia para las víctimas.